Domingo extremo de Los Sin Fama en Guatavita

Juemáchica sí se sufrió! se sudó, se padeció, pero, ante todo, se llegó. Maltrechos, ambos con las rodillas de un cincuentón en el cuerpo de quien apenas llega al tercer piso, pero más que satisfechos.

¡Qué experiencia fue la Merrell Trail Tour 2016! Ninguno de nosotros había participado nunca en una competencia de este tipo; apenas si nos levantamos a ir a jugar fútbol dos veces al mes, y eso cuando no le echamos la culpa a nuestras fatídicas rodillas para esquivar ese sagrado compromiso.

Dos arduas horas de competencia completamos; a través del paisaje maravilloso que ofrece el embalse del Tominé, la majestuosa vegetación de las montañas que la rodean y el encanto de pueblo que yace a sus orillas, ese de las mil y una leyendas: Guatavita. Sobreponiéndonos a la lluvia, la baja temperatura, el barro, las cumbres interminables y esa vocecita que grita no poder más, superamos la prueba Merrell.

Queremos extender desde este espacio nuestro agradecimiento especial a Subaru, que se encargó casi de arrastrarnos de nuestro sedentarismo y convencernos de que iba a ser una experiencia inolvidable. Además, no pudieron extenderse más en atenciones: nos recogieron en su nueva camioneta Forester Modelo 2017 —ya la tengo planillada para cuando sea grande y tenga plata—, corrieron con los gastos de nuestra inscripción en la competencia, nos invitaron a almorzar y después trajeron de vuelta a Bogotá los despojos de lo que quedaba de nosotros.

Subaru y la Merrell Trail Tour, sin lugar a dudas, cumplieron con su promesa. Fue un domingo extremo que nunca se nos va a olvidar.

De ñapa, ahí van un par de fotos y videos para que sean testigos de nuestra 'peregrinación'.